Pacto de Güemes: un acuerdo vertical que deja de lado las necesidades básicas

General04/06/2024 redaccion
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El Pacto de Güemes, presentado como una solución para la crisis social y económica que atraviesa Salta, por ahora resulta más bien un espectáculo político vacío que carece de sustancia. En lugar de surgir de un proceso de consulta genuino a la ciudadanía, este acuerdo inició con un café entre los dos últimos mandatarios provinciales, que por cierto, bien desconectados están hace tiempo de los problemas urgentes.   

La convocatoria de Gustavo Sáenz, en respuesta al fracaso del Pacto de Mayo impulsado por el presidente Javier Milei, parece otra maniobra política. Si bien se invita a aquellos que "quieran defender los intereses de los salteños", la realidad es que este acuerdo ya dio muestra de que está diseñado para satisfacer las agendas de los sectores concentrados del poder salteño.

Con la presencia de los exgobernadores Juan Carlos Romero y Juan Manuel Urtubey, inició ayer la ronda de conversaciones para avanzar. El documento que se firmará el próximo 17 de junio, aniversario de la muerte del general Martín Miguel de Güemes, contendrá, según se informó oficialmente en un parte de tres párrafos, "las coincidencias en torno a las inversiones en infraestructura financiadas por el Estado nacional y que se consideran prioritarias para la provincia". 

Aunque se destaca la importancia de la inversión en infraestructura financiada por el Estado nacional, como las rutas nacionales 51 y 9/34, y el Nodo Logístico y Puerto Seco en Güemes, estas medidas parecen ser solo un barniz superficial para encubrir la falta de abordaje en temas cruciales como la pobreza, el desempleo y la falta de servicios básicos en la provincia.

Los comentarios optimistas tanto de Romero y Urtubey, demuestran que el el statu quo en la Provincia permanece intacto y recibió con beneplácito la consulta. Fue el segundo quien se adelantó a referirse al tema en su columna habitual en la radio de Peña. Allí el ex mandatario dejó de manifiesto que  para salir de este fracaso todos deben "colaborar con la planificación de la estrategia  que se pretende de la Argentina, que no es otra cosa que definir qué queremos ser, contemplando la realidad de cada región", y que esa estrategia debe ser apuntalada con políticas públicas "a través de la inversión pública, oferta educativa, investigación, financiamiento, beneficios fiscales e impositivos entre otros aspectos". Clarito el pedido no? Más beneficios para sus empresas y la de sus amigos. 

En tanto, Romero, en el párrafo final de un comunicado en redes resaltó: “Firmaré el Pacto, convencido que esta es una tarea de todos". Y paso siguiente aclaró valores que deberían ser naturales para cualquier dirigente aunque evidentemente en su caso no lo son: "Despojado de intereses partidarios o personales, tenemos la obligación de no dejar pasar un día sin reclamar, gestionar y trabajar por lo que nos merecemos”. Sí, te creemos Jucaro: estas despojado de todas tus apetencias personales y particulares, sobre todo después de impulsar el aumento de dietas a 8 millones en la cámara alta nacional y aprovechar el momento para desligarte de tus empleados en el diario. 

Los puntos que no se abordaron son elocuentes. Por ejemplo la necesidad de anular el sistema de voto electrónico, una demanda clara y contundente de la ciudadanía salteña que busca hace tiempo sacarse de encima un millonario negociado. 

Además, ninguno expresó de manera inequívoca su compromiso de no buscar un tercer periodo, una cuestión de vital importancia para preservar la democracia y evitar la concentración de poder en manos de unos pocos.

El documento tampoco hace mención al espinoso tema de la deuda millonaria en dólares asumida por Juan Manuel Urtubey en los llamados Fondos de Reparación Histórica y Fondo Bicentenario, créditos destinados a obras que nunca se materializaron y que permanecen en la sombra sin que Saénz haya tomado medidas para esclarecer este asunto.

Menos aún sobre el hecho de investigar a fondo el caso de mayor corrupción de los últimos 10 años: es decir aclarar quién autorizó los millonarios pagos respaldados con facturas falsas en la causa Huergo. Tampoco sobre la cuestión salarial ni sobre los servicios tan demandados en el norte. 

Es indispensable que cualquier documento auténtico contenga puntos verdaderos y no solo planteos vacíos. Negar o ignorar estas realidades sería como vivir en una nube, mientras los problemas reales persisten. Al parecer el sentido es acordar para que nada cambie.  

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