El hallazgo sin vida de Ricardo Erva, de 45 años, se produjo a la vera de la Ruta 5, cerca de Pichanal. La autopsia confirmó que sufrió una brutal agresión con 27 puñaladas, cuatro de ellas en el cuello.
Ocurrió a finales de septiembre, cuando se produjo el hallazgo del cuerpo de un hombre en la ruta provincial N° 5. Durante el fin de semana pasado, se llevaron a cabo diversos allanamientos en el marco de la investigación.
La fiscal penal María Soledad Filtrín Cuezzo, de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas, imputó a un hombre de 36 años por el presunto delito de homicidio calificado por ensañamiento en perjuicio de Erva Ricardo.
Según la información oficial, con la autorización del Juzgado de Garantías Nº 2 de Orán, se procedió a registrar varios domicilios en los que se secuestraron elementos, y se concretó la aprehensión del sospechoso.
La fiscal Filtrín Cuezzo informó que la vinculación del imputado con el hecho se basa en pruebas obtenidas a través de cámaras de seguridad e informes de telefonía celular, que refuerzan las sospechas de su participación en el homicidio. Destacó que no se descarta la posible participación de otras personas en el hecho.
Según dieron a conocer desde Que Pasa Salta, Erva era conocido por sus conexiones con el clan Castedo, una organización criminal implicada en el narcotráfico. Este “trabajador” de los Castedo, ya había sido condenado previamente por transportar grandes cantidades de cocaína, y su rol en la organización era considerado importante. Estaba encargado de una finca, que es propiedad del clan y había sido sorprendido en posesión de cocaína marcada con el sello del delfín, una firma distintiva de la organización.
El último rastro de Ricardo Erva se remontaba al 25 de septiembre, cuando tenía previsto trasladar una camioneta. Días después, su cuerpo fue encontrado en un avanzado estado de descomposición, a la vera de la Ruta 5. La violenta naturaleza de su muerte, con 27 puñaladas, sugiere una posible ejecución vinculada a sus actividades con el clan Castedo.
Las autoridades están investigando el caso, tratando de esclarecer los motivos detrás del asesinato de Erva y de identificar a los responsables. La conexión con el narcotráfico y el clan Castedo apunta a un posible ajuste de cuentas, aunque aún no se descartan otras hipótesis.