174 aniversario del fallecimiento del Libertador Gral. San Martín: por que son 7 los granaderos que custodian su tumba
General17/08/2024 RedacciónLa figura histórica del general San Martín no siempre fue la misma. Su fama de revolucionario no gustaba, en su época, a todas las facciones políticas que buscaban sentar las bases de los estados en los territorios latinoamericanos.
San Martín, luego de cruzar la cordillera para combatir a los realistas en los territorios que hoy conocemos como Chile, luego de ir al norte y combatir a estos mismos ejércitos que respondían a la voz de los colonizadores, los que hoy conocemos como Perú y Bolivia, retorna a estas tierras.
Cuando vuelve, se da cuenta que ha sufrido una gran campaña de desprestigio. No solo de su labor, sino también de la causa que defendía, porque quienes estaban al mando de los cargos más altos de los poderes tenían intereses comunes con los colonizadores.
San Martín tomó la decisión de no quedarse en Argentina por su seguridad y la de su familia. Elige pasar sus últimos años en Europa, donde ya lo conocen a San Martín por sus hazañas como Guerrero en el ejército español.
En Europa pasa 20 años, cuidando de sus hijas y de sus nietas. Se dedica a la carpintería y construye mueble y casas de muñecas para sus nietas, cultiva el hábito de la lectura y hace varias cosas que le dan momentos de plena felicidad.
Lamentablemente, San Martín muere en el exilio en 1850 en Francia, en Blanc-sur-Mer. Pero sus restos, según su testamento, tenían que estar en Argentina, porque él aquí quería morar. Pero como los poderes de turno, los gobiernos que estaban al mando de Argentina, no estaban muy de acuerdo con las ideas revolucionarias que proponía San Martín.
30 años después, se cumplió la cláusula que el general dejó escrita y sus restos llegan a Buenos Aires el 24 de mayo de 1880, gracias a que el presidente de ese momento, Nicolás Avellaneda, hace los trámites necesarios para cumplir el último deseo del Libertador.
Para recibir a los restos del general, se convocaron una gran cantidad de personas, gente que pertenecía a la sociedad rural, al club industrial, a la sociedad tipográfica bonaerense, estudiantes del Colegio Nacional de Buenos Aires, periodistas de distintos medios, dos expresidentes, Domingo Faustino Sarmiento y Bartolomé Mitre, y el actual presidente en ese momento, que era Nicolás Avellaneda. Sus restos son llevados a la Catedral Metropolitana.
Historiadores de la época, cuentan que, sin ser convocados a recibir sus restos, se acercaron siete granaderos que escoltaron al general hasta el manzuleo que se encuentra en la Catedral Metropolitana, destinado al general San Martín.
Hasta el día de la fecha no se sabe quiénes fueron estos siete granaderos que rindieron los homenajes correspondientes a su general. Cuentan en muchos libros de historia de ese momento y periódicos del momento que eran los últimos granaderos que quedaban vivos. Los siete granaderos, son conocidos como un símbolo de dedicación y valor hacia su líder.