Democracia en Salta, ¿está garantizada?
En Salta estamos viviendo bajo un régimen antidemocrático dónde no se respetan las garantías mínimas de un Estado de derecho. El domingo 14 de mayo de 2023, quedó demostrado que las elecciones no son transparentes y no se respeta la participación democrática de toda la comunidad, ni los principios representativos y republicanos que adopta en el art. 1 la Constitución Nacional.
31/05/2023 Sergio Agüero- AbogadoLos países del Continente Americano se han comprometido a respetar el sistema Democrático en sus Gobiernos; tal compromiso lo asumieron al firmar la Carta Democrática Interamericana, en el año 2001, en este instrumento se reconoce que las personas tenemos derecho a la democracia y los estados están obligados a garantizarla. La Carta Democrática es el instrumento más importante con la que cuentan los habitantes para la defensa de la Democracia.
En Salta estamos viviendo bajo un régimen antidemocrático dónde no se respetan las garantías mínimas de un Estado de derecho. El domingo 14 de mayo de 2023, quedó demostrado que las elecciones no son transparentes y no se respeta la participación democrática de toda la comunidad, ni los principios representativos y republicanos que adopta en el art. 1 la Constitución Nacional.
Las reglas de la pseudo-democracia no son equitativas para todos los partidos políticos. Si quien está en ejercicio del poder (dispone del aparato del estado), además cuenta con listas colectoras obligando a todos los intendentes municipales a alinearse y a tolerar la competencia desleal de competidores dentro de sus propios espacios que comparten la candidatura a gobernador y que además son apoyados por éste. Es inevitable que suceda lo impuesto por el régimen, esto es, que gane el gobernador.
La provincia se encuentra atravesando la peor crisis institucional de su historia, solo a modo de ejemplo podemos recordar que en las últimas semanas se realizaron paros y manifestaciones de trabajadores de educación, salud y justicia, los tres pilares fundamentales de un gobierno, reclamando una actualización de sus haberes porque no les alcanza para llegar a cubrir sus necesidades básicas. El gobierno provincial utilizó la represión como medio eficaz para disuadir la protesta de docentes y empleados de la salud, algo que en un estado de derecho sería repudiable.
También es importante recordar que en las últimas elecciones se presentaron varios ex funcionarios que están acusados de cometer actos de corrupción, que por la demora judicial no están condenados (no existe ningún intendente preso por actos de corrupción en Salta), incluso algunos ganaron las elecciones y volverán a ocupar un cargo público, lo cual es gravísimo para nuestra provincia, que es una de las más empobrecidas del país por la mala gestión de los funcionarios.
Actualmente la provincia está atravesada por el narcotráfico, el sicariato, la corrupción y la impunidad, esta combinación explosiva nos está arrastrando inevitablemente a que se disparen todos los índices de falta de seguridad, marginalidad, exclusión, hambre, desnutrición y muertes por desnutrición y deshidratación. Las cifras de todos estos indicadores el gobierno no las publica, lo que hace que sea imposible poder realizar un trabajo sensato de análisis y diagnóstico para desarrollar políticas públicas que nos posibilite enfrentar y solucionar.
Es inexplicable que alguien que tiene una pésima gestión, y los peores índices de la historia de la administración provincial en prestación de los servicios públicos esenciales básicos como ser agua, salud, educación, seguridad, sanitarios, humanitario, ecológico, donde solo en los primeros tres meses del año pasado se MURIERON más de 70 niños de hambre, sí de hambre, así como se lee, nadie haga absolutamente NADA. No existe ninguna consecuencia para ningún funcionario, nadie está rindiendo cuentas ante la justicia por este desastre humanitario.
También fuimos testigos del abandono total por parte del estado de Zaira (la nena wichí en estado de vulnerabilidad que se encontraba postrada a quien los chanchos le habían arrancado los dedos de la mano y que luego terminó falleciendo). Ahora me pregunto ¿puede ganar una elección si no fuera porque todo está organizado para que así suceda?
Es necesario analizar algunos acontecimientos en el desarrollo del proceso electoral: 1) impuso el voto electrónico a pesar de su mayor costo, 2) eliminó las PASO, 3) posicionó 2 o 3 candidatos por cada uno de los 60 municipios, 4) compeliendo a cada intendente que lo apoyaran como candidato a gobernador. Asimismo, 5) apoyó varias listas colectoras, 6) impulsó varias listas a gobernador para debilitar a la oposición, 7) por ley se impone un piso para acceder a una banca legislativa, lo cual coarta la participación de las minorías violando el sistema democrático. Ahora bien, existe un dato que es irrefutable: todos los intendentes eran oficialistas, los 60 municipios estaban pintados de celeste, también se asegura las mayorías automáticas en los órganos legislativos. Con todas estas acciones era inevitable su victoria, en consecuencia, es necesario preguntarse ¿Estas prácticas son democráticas? Hay ciertos elementos que deben existir para que una democracia sea una democracia. Desde unas elecciones libres y justas hasta la garantía de derechos humanos, pasando por valores básicos como la igualdad y la rendición de cuentas.
No es ningún secreto que la calidad institucional en la provincia va cada vez peor y eso, indudablemente, repercute directamente en el funcionamiento del estado, en la administración de la cosa pública y en la calidad de vida de los vecinos de nuestra comunidad, en la medida que exista una hegemonía en el poder como la actual seguiremos transitando el camino de la decadencia democrática.
Si no defendemos y hacemos respetar nuestra Constitución no tendremos nunca un gobierno democrático.