Silencio oficial por el escándalo en la ANDIS | Intervención y despido de Spagnuolo

Nuevas grabaciones del exfuncionario Diego Spagnuolo revelan una supuesta trama de corrupción que salpica a la familia del Presidente y al círculo más cercano de poder. La respuesta oficial se limitó a una intervención del organismo, sin desmentir la veracidad de las acusaciones.

El Gobierno de Javier Milei enfrenta un nuevo y grave escándalo por presunta corrupción, desatado por la filtración de nuevos audios atribuidos a Diego Spagnuolo, el ahora exdirector de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS). En las grabaciones, Spagnuolo no solo menciona un supuesto pedido de coimas por medio millón de dólares mensuales a laboratorios, sino que también implica directamente a figuras clave del poder, incluyendo a la hermana del presidente, Karina Milei, y a los legisladores Martín Menem -quien es presidente del  y "Lule" Menem.

Y lo peor: en el audio más reciente, Spagnuolo involucró a una figura de mucho más peso: una tal "Victoria"... ¿Villarruel? En el nuevo material, se escucha al ahora exfuncionario diciendo: “La gente que comenta los posteos de Victoria o lo que sea... Che, loco, nosotros la votamos a Victoria también. Después, viene Karina con Santiago, con Sandra, los Menem, y ahí va bajando todo. Los senadores, este Paoltroni…”.

En el mismo audio también señala lo siguiente: “Victoria claramente se cansó, se hinchó las pelotas y listo, a otra cosa. El daño que puede hacer Victoria si se para en una vereda distinta... No entiendo cómo no lo están ponderando eso”.

Los audios, cuya autenticidad no ha sido desmentida por el Gobierno, sugieren que las redes de corrupción son más amplias de lo que se creía, con Spagnuolo quejándose de que un "delincuente" puesto en la gestión por la propia familia presidencial estaría armando una "caja" a sus espaldas. Esto pone en entredicho una de las banderas principales de la gestión libertaria: la lucha contra la "casta" y la corrupción.

La reacción oficial: ¿intervención para evitar el conflicto?

La respuesta del Gobierno fue considerada por la oposición como insuficiente. Tras conocerse las grabaciones, el Ejecutivo desplazó a Spagnuolo y al funcionario Daniel Garbellini y, posteriormente, anunció la intervención de la ANDIS. Sin embargo, ni el Presidente, ni su vocero, ni otros altos funcionarios han negado explícitamente la veracidad de los audios o las acusaciones de corrupción.

En una declaración crítica, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se limitó a decir que la existencia de las coimas es algo que "tiene que resolver la Justicia" y afirmó: "No pongo las manos en el fuego por ningún funcionario". Esta declaración, lejos de calmar la situación, es vista como una admisión tácita de la gravedad de los hechos.

El escándalo ha generado un terremoto político. Por un lado, la oposición ha denunciado la situación como un "jubileo de la corrupción" y ha presentado denuncias penales que recayeron en la justicia federal. Por otro lado, la crisis se agrava en medio de la discusión por la Ley de Emergencia en Discapacidad, vetada por el Presidente y cuyo veto fue rechazado por Diputados. La coincidencia de ambos eventos subraya la fragilidad del Gobierno en un área tan sensible.

La estrategia de intervenir la ANDIS y denunciar la "caja de la política" en las pensiones por invalidez se interpreta como un intento de desviar la atención y retomar la narrativa oficial. Sin embargo, los audios, ya en manos de la Justicia, ponen a prueba la promesa de la "nueva política" de Milei y abren una investigación que podría salpicar a los principales actores del Poder Ejecutivo y Legislativo.

La transparencia no es una opción

Dentro de una democracia, el rol del presidente y de los funcionarios públicos, como Karina Milei en su cargo de Secretaria General de la Presidencia, es vital y debe estar regido por los principios de transparencia y rendición de cuentas. La confianza pública se construye sobre la base de que los líderes actúen en beneficio del interés colectivo, sin que existan conflictos de intereses o favoritismos. 

Cualquier indicio de corrupción o de uso de la función pública para fines privados, ya sea en la asignación de contratos o en la toma de decisiones, no solo socava esa confianza, sino que también debilita las bases mismas del sistema democrático. La transparencia no es una opción; es un deber. Por eso, las acusaciones de corrupción deben ser investigadas de forma independiente para garantizar que todos los ciudadanos, sin importar su posición, sean iguales ante la ley.

Vínculación entre Spagnolo y Javier Milei

Aunque no ocupaba un cargo de primera línea, Diego Spagnuolo mantenía un vínculo cercano con el presidente, construido antes de que el libertario llegara al poder. Su llegada lo llevaba a participar de encuentros frecuentes con el mandatario, incluso en la residencia oficial de Olivos.

Spagnuolo formó parte de La Libertad Avanza desde sus inicios: en 2021 fue el 13º candidato a diputado nacional por la Ciudad de Buenos Aires en la lista encabezada por Milei. Además, actuó como abogado del presidente en algunas causas judiciales, reforzando la relación de confianza entre ambos.

Los registros oficiales muestran que Spagnuolo fue la cuarta persona con más ingresos a la quinta presidencial de Olivos entre enero de 2024 y marzo de 2025, con un total de 38 visitas. Solo lo superaron Iñaki Gutiérrez, asesor en redes sociales; el economista Juan Carlos De Pablo; y la kinesióloga personal del Presidente, Leandra Protolongo.

El exdirector de la ANDIS también formaba parte del círculo de amigos y economistas que los domingos se reunían en Olivos para escuchar ópera. En esas fechas coincidió con figuras clave del gabinete, como Mauricio Novelli, vinculado al caso $Libra, así como con otros miembros del equipo presidencial, incluidos Sandra Petovello (35 ingresos), Santiago Caputo (32), Guillermo Francos (21), Patricia Bullrich y Federico Sturzenegger (20), todos con menos visitas registradas que Spagnuolo.