¿Privatizaciones 2024? El deseo de achicar el Estado

Las declaraciones de Pablo Outes, Coordinador de Enlace y Relaciones Políticas y Alberto Castillo, presidente de REMSa, demuestran que más allá de pertenecer uno a la lista del oficialismo nacional y otro a la oposición, ambos tienen el mismo objetivo: privatizar para achicar el Estado.

"Con Sáenz estamos convencidos que el Estado tiene que ser chico y efectivo, pero no podemos expulsar a la gente al desempleo, como idea técnica es buena, pero la realidad no lo permite", afirmó Outes en una entrevista televisiva en donde dejó sentada la postura del mandatario provincial.

Destacó que es necesario un cambio estructural y que en el Congreso va a "luchar" por el crecimiento del empleo en el sector privado para lograr que el Estado sea chico y efectivo. “El interior está así porque no le generaron infraestructura, educación ni condiciones generales para el desarrollo” afirmó.

"Necesitamos CEO´s"

Quien hizo esta afirmación es el presidente de Recursos Energéticos y Mineros de Salta, S.A (REMSa), Alberto Castillo, que integra la precandidatura a diputado nacional por Juntos por el Cambio en segundo término junto a Inés Liendo y que adhieren a Horacio Rodríguez Larreta y Gerardo Morales a nivel nacional.

Y llamó nuestra atención porque, si bien Castillo es el ceo de REMSa, su intención pareciera ser legislar como si el Estado fuera una empresa. En este sentido vale mencionar que las funciones de un ceo es "velar por la visión y misión de una empresa, la correcta distribución de la información, asegurándose que todos los trabajadores conozcan los objetivos, misión y visión que persigue determinada empresa".

“Ya no es suficiente con ser un buen legislador, sino que se requiere de CEO's de empresas capaces de gestionar y atraer inversiones para la provincia”, dijo el cordobés radicado en Salta en una radio local dando indicios del interés que persiguen y cómo hacen política actualmente, siendo funcionarios.

¿Podría el Estado nacional concebirse como una empresa privada? ¿Cuáles serían los resultados?

Durante el gobierno de Carlos Saúl Menem en la década de 1990 del siglo pasado, se privatizaron empresas siderúrgicas, de generación y distribución de electricidad, de aguas y servicios locales, la empresa nacional de gas, otros ramales ferroviarios, los subterráneos de Buenos Aires y nuevas áreas petroleras.

Las consecuencias fueron lamentables porque las indemnizaciones por retiro voluntario o despidos no se pagaron a todos, pero además, dejaron a millones de argentinos sin la posibilidad de trabajar para sostener a sus familias. La pérdida de empleos fue traumática. Así, en Argentina, decenas de miles de trabajadores de las antiguas empresas públicas se quedaron sin trabajo. El desempleo creció como resultado de las privatizaciones, pero también de la liberalización económica.

Experiencia sobre privatizaciones y achiques del estado conocemos. ¿Repetiremos la historia?